27 de diciembre de 2018

ÉGLOGA, SUBGÉNERO DE LA LÍRICA.


El subgénero lírico "égloga" (que etimológicamnete significa 'elección, selección') nace emparentado con la literatura bucólica (relativa al 'pastor de bueyes'), y que no debe confundirse con la pastoril (en la Edad Media hubo literatura pastoril —pastorellas, serranillas...—, mero juego lírico cortesano, pero no bucólico, como nos recordó Jesús Gómez).
[Gómez, Jesús. "Sobre la teoría de la bucólica en el Siglo de Oro: hacia las églogas de Garcilaso", in Dicenda. Cuadernos de Filología Hispánica, 10 (1991-1992), pág. 117].

En efecto, debemos rastrear sus orígenes en Teócrito de Siracusa (ca. 310 - 260 a.d.n.e.), que compuso unos Idilios (etimológicamente εἰδύλλιον significa 'escena, pequeño cuadro'), y que dan la forma primera al subgénero bucólico o idílico pastoril. Quizá inicialmente estuvo conexa con los cantos a Dionisos por parte de los pastores de la isla de Cos, por lo que acabó relacionándose la actividad de los 'boyeros' -βουκόλος, de ahí bucólico (βουκολικός)- con el canto pastoril, en un escenario campestre -alejado del entorno urbano-, y donde los motivos de flores, árboles, brisas, aves, abejas y alba son repetidos. Esta naturaleza, bien sean las tierras de Siracusa, bien las referidas a los frondosos bosques y prados fértiles de Arcadia (en el Peloponeso, la tierra del dios Pan, el dios de los pastores), será contemplada externamente y nunca se funde con los sentimientos del poeta.

IDILIO XI: El cíclope,

de Teócrito de Siracusa.

Traducción de Ipancro Acaico
(México: Imprenta de Ignacio Escalante, 1877).


Ningún remedio contra Amor, ni ungüento
Ni leves polvos hay, según noticias,
Sino las Musas; gran medicamento,
Que aunque germina en nuestro suelo ¡oh Nicias!
No es el poder hallar fácil intento.
Y tú, que de las Nueve eres delicias,
Y de la ciencia médica las llaves
Tienes al mismo tiempo, bien lo sabes.

Así pasaba plácida la vida
Aquí en Sicilia el Cíclope afamado
Polifemo el de antaño, a la garrida
Galatea siguiendo enamorado.

El bozo aun no cubría la encendida
Mejilla, ni su labio nacarado;
Y no nutrían rosas ni manzanas
Su ciego amor, mas furias inhumanas.

Nada cuidaba ya: del monte al hato
La grey tornaba sin pastor ni guía;
A su bella cantando el insensato
Desde el alba
en la playa se escocía:
De Venus le causó tal arrebato
El dardo que en el pecho hondo tenía.
Halló el remedio; así con tosca boca
Mirando al mar, cantaba en alta roca:

¿Por qué, cándida Ninfa Galatea,
Del que rendido te ama huyes esquiva?
Tu pura tez cual requesón blanquea.
Y más que un ternerillo eres altiva;
Cual uva que inmatura verdeguea
Amarga, y que un cordero más festiva,
Llegas si al dulce sueño cierro el ojo,
Y al despertar, de huir te viene antojo.

Huyes de mí cual tímido cordero
Huye al mirar al espumante lobo.
¡Niña! De tí me enamoré primero
Cuando mi madres y tú, bajo aquel pobo
Jacintos deshojabais: yo el sendero
Al monte os enseñé, y en dulce arrobo
Me tienes hoy, y siempre, desde entonce;
Mas tú, lo sé, ¡por Jove! eres de bronce.

¡Bellísima mujer! ¿Por qué se aleja
De mí tu corazón, mi amor comprende?
¿Es porque una tan solo, hirsuta ceja
Por mi frente larguísima se extiende,
Que llega de una oreja a la otra oreja,
Y abajo un ojo solitario esplende?
¿Es porque encima de mi labio asoma
Ancha nariz desagraciada y roma?

Pero tal como soy, pacen millares
De ovejas pingües en el campo mío;

La mejor leche ordeño y bebo a mares,
Y queso no me falta, ya en estío,
Ya en medio del otoño lo anhelares
O del extremo invierno en lo más frío;
Y siempre están henchidos mis cestones
De frutas y variadas provisiones.

En pulsar la zampoña soy más diestro
Que ningún otro Cíclope en contorno,
Y cantándote a ti y el amor nuestro,
,
¡Mi prenda, mi manzana!, al hogar torno
A media noche. Para ti amaestro
Once venadas, de mi grey adorno,
Todas fecundas ya, con cervatillos,
Y de oso cuatro bellos cachorrillos.

Tuyo todo será. Ven y disfruta
De mi riqueza, y deja que las olas
Se estrellen en la playa:
tú en mi gruta
Más dulce vivirás conmigo a solas.
Laurel y vides de sabrosa fruta,
Cipreses tengo allí, hiedras y violas;
Y agua fresca me manda el Mongibelo
De nieve derretida,
don del cielo.

¿Quién vivir en el mar a tal prefiere?
De vello aunque me cubre áspero toldo,
Tengo leña de encino; y nunca muere
La lumbre de mi hogar bajo el rescoldo.
Pero sin ti, si tu desden me hiere,
A que se abrase mi alma yo me amoldo,
Y aun la única pupila con que veo,
Prenda la más valiosa que poseo.

¡Triste de mí! ¿Por qué no vine al mundo
Con aletas de pez? Tu rauda planta
Siguiéndote besara en lo profundo
Del piélago furioso que me espanta.
Diérate lirios blancos sin segundo
Y la amapola, cuyo rojo encanta:
Aquellos en invierno, ésta en verano,
Que darlos a la vez no está en mi mano.

¡Oh niña! Si arribare cierta nave
Aquí a nadar me enseñará siquiera
Un marinero audaz, que el arte sabe.
En el fondo del mar de esta manera
Probaré qué placer en vivir cabe.
¡Oh Galatea, sal! y una vez fuera
Tornar olvida a tu espumosa casa,
Como sentado aquí, a mí mismo pasa.

Ven a pacer conmigo mi rebaño,
Y la leche a ordeñar y a hacer el queso.
Sola mi madre es causa de mi daño
Que no te habló jamás de mi embeleso,
Aunque por ti miraba de año en año
Que me iba consumiendo hasta el exceso.
Diré que entrambos pies y la cabeza
Me duelen, y tal vez le dé tristeza.

¡Triste Cíclope, Cíclope! ¿Tu juicio
Adonde huyó? Mejor es que recuerdes
De tejer canastillas el oficio
Y a tus ovejas cortes ramas verdes.
Ordeña el animal a tu servicio:
Tras la cabra del monte ¿a qué te pierdes?
Hallar es fácil otra Galatea
Que más hermosa y menos fiera sea.

Mil vírgenes me invitan a la danza,
Y la noche que accedo al llamamiento
Respiran todas gozo y bienandanza:
¡Mi grandeza y valer no en vano siento!—
Fomentaba su amor y su esperanza
Polifemo cantando; y más contento
Pasaba así la vida placentera
Que si montones de oro poseyera.

18 de noviembre de 2018

EJERCICIOS. FORMACIÓN DEL GÉNERO DE LOS SUSTANTIVOS


Aquí tiene un test para aprender a señalar los procedimientos que existen para marcar el género de los sustantivos.







20 EJEMPLOS DE SUSTANTIVOS HETERÓNIMOS


Sólo el 16% de los sustantivos presentan rasgos de género mediante recursos morfológicos, esto es, mediante desinencias de género (mediante flexión de género -hijo/hija- o mediante derivación -conde/condesa-).

El resto lo hacen sintácticamente, a través de los determinantes (en el caso de los sustantivos de género común: "el espía/la espía"; los ambiguos: "el mar/la mar") o de los complementos (como los epicenos: "el tiburón macho/el tiburón hembra") ─establecidos estos dos últimos con una clara oposición referencial─, o léxicamente (en el caso de la heteronimia: "el padre/ la madre").

Los sustantivos heterónimos son vocablos que “utilizan radicales diferentes para distinguir el género gramatical(NGLE, 2009, pág. 87). Por tanto, se forman mediante dos signos léxicos distintos, bajo dos formas genéricas también distintas, e incluyen, como parte de su significado, los semas ‘macho’ y ‘hembra’ (en los animales) o sus variantes ‘varón’, ‘mujer’ (en los humanos) que concretan, además de una referencia animada, el sexo de la referencia; por tanto, no hace falta explicitarlos (como sí ocurre en los epicenos).

Y aunque generalmente estos términos en masculino plural no agrupan a los de uno y otro género ("frailes" no recoge a 'frailes y monjas'), podemos encontrarnos con algunos casos en que sí sucede esto, neutralizando el sema específico 'varon/macho', como "caballos" que recoge a 'caballos y yeguas' o "padrinos", que recoge a 'padrino y madrina'.

Estos sustantivos pueden clasificarse:

① por su oposición estríctamente léxica: varón-hembra.
② por su oposición léxica y además desinencial: el padrino/ la madrina.
Veamos algunos ejemplos:

MASCULINO.
caballero
caballo
carnero
compadre
cura
femenino
fraile
galán
hombre
jinete
macho
marido
padrastro
padre
padrino
papá
patriarca
toro (buey)
varón
yerno
zángano
FEMENINO.
dama
yegua
oveja
comadre
monja
masculino
monja
dama
mujer
amazona
hembra
mujer
madrastra
madre
madrina
mamá
matriarca
vaca
mujer
nuera
abeja







17 de noviembre de 2018

EJERCICIOS. FORMACIÓN DEL PLURAL DE SUSTANTIVOS COMPUESTOS.


Forme el plural de los siguientes sustantivos compuestos.




BIBLIOGRAFÍA.-







EJERCICIOS. FORMACIÓN DEL PLURAL DE LOS SUSTANTIVOS


Forme el plural de los siguientes sustantivos.







EJERCICIOS.FORMACIÓN DEL FEMENINO DE LOS SUSTANTIVOS


Forme el femenino de los siguientes sustantivos.







EJERCICIOS. FAMILIAS LÉXICAS


Señale los lexemas de las siguientes series de familias de palabras.







EJERCICIOS. TIPOS DE DESCRIPCIÓN


Practique con los tipos de descripción y sus definiciones.







GUÍA DE LECTURA DE "Nata y Chocolate" de Alicia Borras Sanjurjo.


ÍNDICE DEL CUESTIONARIO sobre el libro de Alicia Borrás Sanjurjo, Nata y chocolate".
Introducción.
Capítulo 1. Sonia tenía once años...
Capítulo 2. La puerta se abre y una profesora nueva entra...
Capítulo 3. En el recreo todos hablan de lo mismo...
Capítulo 4. A Sonia le duele la cabeza...
Capítulo 5. ¡Eh! Natita...
Capítulo 6. En el patio está Lola...
Capítulo 7. Mientras su abuela calceta un jersey.
Capítulo 8. Cuando llega al colegio, Olga y Pilar...
Capítulo 9. Durante el recreo...
Capítulo 10. Si te parece...
Capítulo 11. Sin Lola en el colegio
Capítulo 12. Hoy han empezado en el primer recreo...
Capítulo 13. En el recreo, todos están pendientes de Lola...

0. INTRODUCCIÓN.

1. INVESTIGACIÓN.

1.1. Obtenga datos biográficos de la autora:

a) Puede encontrar unos mínimos datos en la wikipedia: https://gl.wikipedia.org/wiki/Alicia_Borrás.
b) Podemos compensarlo leyendo las pp. 107-108 del propio libro (siempre citaremos por la ed. de 2018), donde tenemos una breve biografía de la autora: https://www.yumpu.com/es/document/read/34771451/descarga-en-pdf-una-entrevista-con-alicia-borras-anaya-infantil-y-.
c) Por otro lado, la editorial Anaya también es excesivamente parca en datos, como podemos ver en este enlace: https://www.anayainfantilyjuvenil.com/libro/sopa-de-libros/nata-y-chocolate-9788466793018/.
d) Finalmente, le ofrecemos el siguiente enlace: http://5ovejasnegras.com/2015/03/24/alicia-borras-sanjurjo/

La biografía debe ser breve y veraz (entre 8 y diez líneas).
Recuerde que los datos esenciales de toda biografía son:

• Fecha y lugar de nacimiento (y si hubiese fallecido, de su muerte).
• Profesión, logros académicos, literarios y personales más relevantes (remarca si esta es su primera novela, o si tenía ya amplia experiencia, o la ha logrado a fecha de hoy).
• Eventos principales de su vida que sean digno de mencionar.
• Significación histórica o literaria.

12 de octubre de 2018

GUÍA DE LECTURA DE "Endrina y el secreto del peregrino", de Concha López Narváez.


ÍNDICE DEL CUESTIONARIO sobre el libro de Concha López Narváez, "Endrina y el secreto del peregrino".
Introducción.
Capítulo 1. Voces en la niebla.
Capítulo 2. Los bandoleros y el gran oso bermejo.
Capítulo 3. Endrina y los cantos peregrinos.
Capítulo 4. Un largo camino y un extraño suceso.
Capítulo 5. ¿Adónde irá aquel 'romeiro'?
Capítulo 6. Fray Roderick de Chester.
Capítulo 7. Una estrella fugaz en el cielo de abril.
Capítulo 8. Un camino de nieve.
Capítulo 9. San Millán de la Cogolla.
Capítulo 10. Burgos.
Capítulo 11. ¿Por qué siempre marchar?
Capítulo 12. León.
Capítulo 13. La joya perdida.
Capítulo 14. El juicio de Dios.
Capítulo 15. Nadar toda la mar y quedar en la ribera.
Capítulo 16. La subida al puerto del Cebrero.
Capítulo 17. La gran culpa de don Guillaume de Gaurin.
Capítulo 18. Compostela.
Capítulo 19.Buscar agujas entre pajas.
Capítulo 20. El duque de Lagiracq.

INTRODUCCIÓN.

1. INVESTIGACIÓN.

1.1. Obtenga datos biográficos de la autora:

a) en la Wikipedia, buscando “Concha López Narváez” o a través de este enlace directo: https://es.wikipedia.org/wiki/Concha_L%C3%B3pez_ Narv%C3%A1ez
b) en la editorial SM, en el enlace: https://es.literaturasm.com/autor/concha-lopeznarvaez#gref
c) en la editorial Planeta, mediante el enlace: https://www.planetadelibros.com/autor/conchalopez-narvaez/000000792
d) en su propia web, en el enlace: http://www.conchalopeznarvaez.com/biografia.pdf

Debe ser breve y veraz (entre diez a quince líneas).
Recuerda que los datos esenciales de toda biografía son:

• Fecha y lugar de nacimiento (y si hubiese fallecido, de su muerte).
• Profesión, logros académicos, literarios y personales más relevantes (remarca si esta es su primera novela, o si tenía ya amplia experiencia, o la ha logrado a fecha de hoy).
• Eventos principales de su vida que sean digno de mencionar.
• Significación histórica o literaria.

8 de octubre de 2018

EJERCICIOS. 2º de ESO. Tema 01.

Realiza los ejercicios de este test, y podrás descubrir qué sabes sobre...

El diario.
La instancia o solicitud.

Propiedades del texto.

Lengua. Lenguaje. Habla. Dialecto.
Bilingüismo.
Variedades de la lengua.
Origen del castellano y sus variedades.
Lenguas de España.


Espero que te sirva de apoyo a tu repaso y estudio.







16 de septiembre de 2018

PROPIEDADES DEL TEXTO. (I).



TEMAS QUE VAMOS A DESARROLLAR
1. Adecuación.
2. Coherencia.
3. Cohesión.
4. Corrección.

Denominamos TEXTO a la unidad básica de comunicación que tiene sentido completo. Éste puede ser una palabra o una multitud de oraciones que tienen propósito comunicativo.

Cuatro son las propiedades que debe cumplir un texto para que podamos considerarlo como bien construido: adecuación, coherencia, cohesión y corrección.

Tomado de: https://drive.google.com/file/d/0B8Nt_nRCFPmyTldRRHZjWE1HbnM/view?usp=sharing 

1. ADECUACIÓN.


Un texto es adecuado si consigue el propósito o intención comunicativa(que veremos más adelante) que se marcó el emisor, esto es, si se ha adaptado a la situación en la que se produce la comunicación. Por ello habrá de tener en cuenta:

a) la situación comunicativa (cotidiana o formal),
b) el receptor

al que va dirigido el mensaje, contemplando el mayor o menor grado de confianza, estatus y jerarquía (fórmulas de respeto y distancia o trato familiar y amistoso: usted-- tú),
c) el nivel de formalidad (registro coloquial, estándar, culto) con arreglo a las características del receptor (más o menos culto),
d) el tema que se trata (en función del receptor), con mayor (tecnicismos) o menor léxico especializado (vulgarismos, lenguaje de argot),
e) el canal utilizado (oral o escrito).
f) la oportunidad del tipo de texto empleado. Que en esquema quedaría así:

Por ello, para comprobar si un texto es adecuado o no, debemos plantearnos las siguientes preguntas:
a) ¿Quién produce el texto?
b) ¿Con qué intención (informar, convencer, regular-guiar-instruir, producir belleza, anticipar)?
c) ¿En qué situación se encuentran ambos y ámbito de uso empleado (formal, informal...?
d) ¿A quién se dirige (emisor real, ideal o implícito, concreto o explícito, único o plural, sexo, clase social, grado de instrucción...)?
e) ¿Qué tipo de relación mantienen el emisor y el receptor y cómo se dirige a él (cómo lo cita, lo interpela, hay complicidad con él, le pregunta, le increpa, distancia, proximidad…).?
f) ¿Es adecuado el nivel de lenguaje empleado (vulgar, informal, culto) y el registro o variedad lingüística (idiolecto, geolecto, sociolecto, fasolecto)?
g) ¿Qué tema se trata? (serio, jocoso, académico...).
h) ¿Qué canal se utiliza (oral o escrito, audiovisual, podcast...)?

h1) Si oral: ¿El tono, volumen, gesticulación, velocidad, etc... son correctos?
h2) Si escrito: hay que fijarse en la tipografía (comillas, negritas, mayúsculas, versalitas, cursivas...), ortografía, disposición (márgenes, columnas, espaciados...)) imágenes y signos especiales (exclamaciones e interrogaciones, siglas, extranjerismos, numeración, símbolos, emoticones, etc.). Distinguir el tipo de canal escrito: libro, periódico, whassap, correo electrónico, chat, etc.

i) ¿Es apropiado el tipo de texto empleado (lenguaje literario, periodístico, publicitario, técnico-científico, jurídico-administrativo, humanístico-académico; texto expositivo, argumentativo, narrativo, descriptivo, instructivo, predictivo, retórico, conversacional)?

El esquema de todo esto quedaría del siguiente modo:

2. COHERENCIA.

La coherencia es una propiedad del texto que se relaciona con la organización de la información y con el conocimiento que comparten el emisor y el receptor sobre el contexto. Para que haya coherencia debe haber una relación lógica entre los significados del texto.

Un texto será coherente cuando toda la información que contiene está relacionada con el tema, esto es, todas las ideas están relacionadas entre sí y referidas a un mismo tema. Si alguna idea no lo está, entrando en contradicción, entonces se produce incoherencia.

Así, a cada párrafo le corresponderá una idea.

En un texto coherente se da una progresión temática consecutiva, una progresión de la información (de ahí que hablemos de idea principal y secundarias), siguiendo un orden lógico y estructurado (según el tipo de secuencia textual que se de en en cada caso: secuencia narrativa, secuencia descriptiva, secuencia argumentativa, secuencia expositiva, secuencia dialogal, instructivo-prescriptiva, predictiva y retórica o poética).

Estas secuencias generarán una estructura homogénea (cuando todas las secuencias son iguales) o hetereogénea (cuando hay mezcla de tipos de secuencias).

Todo texto consta de tres apartados: introducción, desarrollo y conclusión.


3. COHESIÓN.

La cohesión es una propiedad de todo texto bien construido en el que cada enunciado se relaciona con los demás mediante procedimientos léxico-semánticos, gramaticales y lógico-sintácticos.

Un texto está cohesionado, tiene cohesión, cuando el léxico que contiene está formado por palabras relacionadas entre sí (generalmente por reiteración semántica: bien por sinonimia, antonimia, hiperonimia o hiponimia; o por procedimientos de sustitución, a través de los pronombres), y por párrafos y enunciados conectados lógicamente mediante nexos adecuados (los llamados conectores: que son conjunciones o locuciones conjuntivas).
Para esta cuestión hay que fijarse en cuál es la palabra clave que sintetiza el tema del texto. Por regla general es el término que más se repite.
Además, hemos dicho que debemos prestar especial atención a las palabras o grupos de palabras que sirven para unir ideas expresando claramente el modo en que se relacionan entre sí, y que denominamos "conectores". Existen diversos tipos de conectores, según sea el texto oral o escrito. Aquí nos centramos, inicialmente en el texto escrito:

de adición, que son aquellos que permiten añadir información, seguir hablando sobre un tema o presentar elementos adicionales: además, asimismo, del mismo modo, de la misma manera, igualmente, no sólo... sino también..., también.

de causa, que expresan la causa o la razón de ser de algo: a causa de, como, dado que, debido a, gracias a, por culpa de, porque, pues, puesto que, visto que, ya que.

de condición, que presentan acciones o hechos cuya realización (o no realización) es necesaria para que se cumpla otra acción o hecho: a menos que, con la condición de que, con tal que, con tal de que, si, siempre que, suponiendo que.

de consecuencia, que introducen acciones o hechos que son consecuencia o resultado de otras acciones o hechos: a consecuencia de, así, así que, de ahí, en consecuencia, entonces, es por eso que, por consiguiente, por esa razón, por eso, por lo tanto.

de finalidad, que expresan la finalidad, el objetivo, el propósito, el fin, etc., de una acción: a fin de, a fin de que, con el fin de, con el fin de que, con el objetivo de, con el propósito de, con la intención de, con el objeto de, de manera que, de modo que, de tal manera que, de tal modo que, para, para que.

de ilustración o aclaratorios, que permiten desarrollar de modo más preciso una idea mediante aclaraciones, reformulaciones, precisiones, ejemplos, etc.: a saber, así, en efecto, en otras palabras, es decir, o sea, esto es, por ejemplo.

de oposición o adversativos, que introducen ideas opuestas, contradictorias o incompatibles. Sirven para formular una oposición, una restricción o una objeción: a pesar de, al contrario, aunque, comparado con, de lo contrario, en cambio, en comparación con, mientras que, no obstante, pero, si no, sin embargo.

de orden, jerarquía o cronológicos, que se usan para introducir un tema o para situarse en él haciendo referencia a acciones o hechos que ya se han mencionado o que son conocidos por los intrelocutores: ante todo, antes de nada, antes que nada, después, después de lo cual, después de lo dicho, en primer (segundo, tercero) lugar, en principio, en último lugar, finalmente, luego, para copncluir, para empezar, para concluir, por otra parte, por otro lado, por último, por una parte... por otra..., por un lado... por otro..., primero (segundo, tercero, cuarto...)=, sobre todo, y así sucesivamente, y además.

de referencia, que pueden utilizarse para exponer de modo ordenado una serie de ideas o argumentos, ya sea simplemente estableciendo una secuencia o bien jerarquizando las ideas de acuerdo con su importancia: a propósito de, al respecto, con respecto a, con respecto de, como he(mos) dicho, como se mencionó anteriormente (más arriba, en el anterior párrafo, en el anterior capítulo...), con relación a, con respecto a, con respecto de, de esta manera, en cuanto a, en este caso, en lo que respecta a, en lo relativo a, según.

de resumen, que se utilizan para cerrar o acabar un razonamiento, ya sea resumiendo los puntos principales o presentando una conclusión que se desprenda de lo dicho: como he(mos) mostrado, en conclusión, en definitiva, en pocas palabras, en resumen, en síntesis, en suma, para resumir.

de temporalidad, que permiten situar acciones o hechos en el tiempo, bien respecto a otras acciones o hechos, bien respecto al momento en el que el locutor habla: a partir de ahí (de aquí), actualmente, ahora, ahora que, al final, al principio, antes, apenas, cuando, desde, desde entonces, después, durante, en nuestra época (nuestro tiempo, nuestros días), en otra época (tiempo, días), enseguida, entonces, hasta, hoy en día, luego, más tarde, mientras, mientras que, mientras tanto, una vez que.

RECORDEMOS:

SINONIMIA: cuya etimología griega es σύν (syn, "con -el mismo-"), y el sustantivo ὄνομα (ónoma, "nombre").
Son palabras que tienen un significado muy parecido (nunca suele ser exacto).
En ocasiones, los sinónimos son contextuales, esto es, sólo se dan en un texto y contexto determinado, pero no en el resto.
Ejemplo: ajuar, atavío, atuendo, equipo, indumentaria, muda, prendas, ropa, trajes, vestidos.
Los sinónimos (e hiperónimos) se utilizan para no repetir una misma palabra en un texto.

ANTONIMIA: cuya etimología griega es ἀντι- (anti-, "contrario, opuesto") y el sustantivo ὄνομα (ónoma, "nombre").
Palabra cuyo significado es opuesto, esto es, significa lo contrario de otra.
Esta oposición, según su significado, puede ser:

gradual, cuando podemos graduar la oposición, pudiendo decir que es más o menos *. Así, entre frío y caliente, tenemos situaciones intermedias, como tibio, templado, helado, pudiendo decir que es más o menos frío o caliente; entre hermoso y feo tenemos situaciones intermedias como bonito, lindo..., pudiendo decir que es más o menos hermoso o feo; entre blanco y negro tenemos situaciones intermedias como gris..., pudiendo decir que es más o menos blanco o negro;
recíproca: porque la oposición en realidad es implicativa (no puede exitir el uno sin el otro), como vemos en la oposición antonímica suegro-yerno, que implica que si uno es el suegro el otro necesariamente es el yerno, y al revés; o en la oposición médico-paciente, que implica que si uno es el paciente el otro es el médico; o en comprar-vender, que implica que para vender algo alguien tiene que comprar; o en enseñar-aprender, recibir-tomar, etc.
► y excluyente: donde se excluyen, anulan, necesariamente los dos términos, sin posibilidad de gradación, como vemos en las antonimias muerto-vivo, soltero-casado, inocente-culpable, sano-enfermo, etc., en los que si se da uno no se puede dar el otro.
Si nos fijamos en su forma, podrán ser:
morfológicos o gramaticales o de negación, porque están creados con prefijos, generalmente de negación, (como a-, anti-, contra-, des-, i-, in-, im-, sin-...), como en el grupo de antónimos normal - anormal, colocar - descolocar, cansar - descansar, paciente - impaciente, completo - incompleto, tratable - intratable, vidente-invidente,

léxicos, cuando se construyen con formas léxicas diferentes como en vidente - ciego, divertir - aburrir, hola - adiós, paz - guerra, vivir - morir, dulce - salado, cielo - infierno, etc.

HIPERONIMIA: cuya etimología griega es ὑπέρ (hypér, "sobre") y el sustantivo ὄνομα (ónoma, "nombre").
Es una palabra con una significación tan amplia que incluye los significados de otras más precisas o específicas (a las que llamamos hipónimas), de modo que podría sustituirse por cualquiera de ellas.
Así, "mes" sería hiperónimo de cualquier mes más específico, como es enero, febrero, marzo, abril, mayo, junio, julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre.
Ejemplo:
► el hiperónimo vestuario engloba a palabras (hipónimos) como pantalón, camisa, suéter, falda, vestido...;
► el hiperónimo cereal engloba a palabras como arroz, avena, cebada, centeno, escanda, espelta, fonio, maíz, mijo, quinua, sorgo, trigo, triticale...;
► el hiperónimo planetas engloba a palabras como Júpiter, Marte, Mercurio, Neptuno, Saturno, Tierra, Urano y Venus.

HIPONIMIA: cuya etimología griega es ὑπό (hipó, "bajo, debajo") y el sustantivo ὄνομα (ónoma, "nombre").
Es una palabra cuyo significado es más específico que el de otra en la que está englobada. Las palabras hipónimas poseen todos los rasgos semánticos de su hiperónimo correspondiente.
Así, "minuto", "segundo" y "hora", "día", "mes", "año", "lustro", "siglo" y "década" son hipónimos de la palabra "tiempo".
En ocasiones, una palabra hipónima, a su vez, puede ser hiperónima de otros hipónimos. Por ejemplo, en la imagen que hemos puesto más arriba, el hiperónimo alimento tiene como hipónimos palabras como carne, pescado, fruta . A su vez, "fruta" es hiperónimo de los hipónimos "naranja, manzana, fresa". E, igualmente, naranja es hiperónimo de los hipónimos "valencia, navelina y salustiana".

4. CORRECCIÓN.


Un texto tendrá corrección cuando respete las normas académicas que rigen el uso correcto de la lengua. sin errores ortográficos, morfosintácticos, uso adecuado del léxico, etc.





26 de agosto de 2018

LOS HIPOCORÍSTICOS O NOMBRES DE PERSONAS EN SENTIDO CARIÑOSO Y FAMILIAR.


TEMAS QUE VAMOS A DESARROLLAR
1. Definición.
2. ¿Cómo se forman los hipocorísticos?.
3. Abecedario de algunos hipocorísticos?


DEFINICIÓN.

El término hipocorístico procede etimológicamente del griego ὑποκοριστικός (hypokoristikós, acariciador), y es un antropónimo o nombre de persona empleado de manera cariñosa.
[Vid nuestra entrada en este blog: "¿Qué es un antropónimo y tipología?"]

Según el DLE (Diccionario de la Lengua Española) se define como "

«dicho de un nombre: que, en forma diminutiva, abreviada o infantil, se usa como designación cariñosa, familiar o eufemística; p. ej., Pepe, Charo. U. t. c. s. m.».

Por su parte, J. Corominas lo define como

« aquella forma familiar que toman ciertos nombres de pila, especialmente en boca de los niños o de los adultos que imitan su lenguaje».
[ Corominas, J. et Pascual, J. A. Diccionario crítico etimológico castellano e hispánico. Madrid: Gredos, 1989, Vol. III, pág. ].

Por tanto, todo hipocorístico viene a ser una deformación del antropónimo. Ahora bien, no todos los hipocorísticos se han formado exclusivamente en virtud de las definiciones anteriores, como vamos a ver a continuación. Tienen además los hipocorísticos la particularidad de que pueden variar en su forma según su uso sea familiar, regional e incluso nacional, y, a la inversa, un hipocorístico puede hacer referencia a varios nombres propios ["Tito" puede significar tanto Antonio (> Antoñito > Tito), como José (> Joselito > Tito)...].

22 de agosto de 2018

A BUEN ENTENDEDOR POCAS PALABRAS

"A buen entendedor pocas (sobran) palabras" es un dicho popular que viene a significar que una persona inteligente no necesita una explicación detallada o prolija para entender lo que se le está diciendo.

Puede tener diversas connotaciones:

• Tendrá una connotación positiva cuando se considera al "interlocutor sobradamente inteligente para entender lo que se le dice":
...mas basta, es suficiente con lo dicho, que a buen entendedor...
• Tendrá una connotación negativa cuando queremos dar a entender que "alguien está dando demasiadas explicaciones":
...basta ya, que es suficiente con lo que has dicho hasta ahora, que a buen entendedor...
• Tendrá una connotación despectiva cuando se considera que "el receptor no ha entendido nada y, por tanto, no hace falta continuar con la exposición":
...para qué seguir, a buen entendedor...
• Tendrá una connotación de advertencia cuando queramos avisar, amonestar o exhortar al interlocutor de que no hace falta continuar (sea porque no conviene hablar más, sea por otro motivo):
...mas basta, es suficiente , a buen entendedor...
.

EN LA LITERATURA.

• Juan Ruiz Arcipreste de Hita. "Libro de Buen Amor" (1330-1343?), c. 1610d: «Pocas palabras cumplen al buen entendedor».
• Íñigo López de Mendoza. "Refranes que dizen las viejas tras el fuego": «A buen entendedor, pocas palabras».
• Fernando de Rojas. "La Celestina" (1499?), Acto VIII, 23 :«A buen entendedor...».
• Miguel de Cervantes. "El Ingenioso caballero Don Quijote de la Mancha" (1616), Capítulo 37: «al buen entendedor, pocas palabras».
• José María de Pereda. "De tal palo, tal astilla": "-¿Hiciste tú más que suspirar por ella? - Al buen entendedor...».
• Leopoldo Alas, Clarín. "La Regenta" (1884-1885), Capítulo 15: "¡Ta, ta, ta! Si me oyeran me callaría. Fermo... a buen entendedor...».
EN OTRAS LENGUAS.

De España.

. Catalán: A bon entenedor, poques paraules.
. Euskera: Ulertzaile onari, hitz gutxi.
. Gallego: A bo entendedor, poucas palabras bastan.

Clásicas.

. Griego clásico: φρονέοντι συνετὰ γαρύω (digo cosas inteligibles para el inteligente).
. Latín: Intelligenti pauca (a los inteligentes, pocas -palabras-).
Dictum sapienti sat est (lo dicho, al sabio le basta)
Sapienti pauca (a los sabios, pocas -palabras-).

Del mundo.

. Alemán: Dem klugen Kopf genügt ein Wort (a la cabeza lista una palabra le basta).
. Árabe: (Quien no comprende una mirada tampoco comprenderá una larga explicación).
. Francés À bon entendeur, salut! (a buen entendedor, ¡hola!).
. Griego moderno: Μια φορά το λέν τ' ανθρώπου και δέκα του γαϊδάρου (una vez lo dicen a la persona y diez al asno).
. Inglés: A word to the wise is enough (una palabra es suficiente para el sabio).
. Italiano: A buon intenditore, poche parole (a buen entendedor, pocas palabras).
. Portugués: Para bom entendedor, meia palavra basta (para buen entendedor, media palabra basta).
ANECDOTARIO.

1. Cierto día un mendigo solicitó audiencia al cardenal Mazarino (1602-1661), primer Ministro del rey francés Luis XVI y sucesor del cardenal Richelieu, para pedirle ayuda y poder así salir de las penurias que estaba pasando. Éste accedió a dársela, pero bajo una condición: solo podía decir dos palabras. El mendigo, que aceptó la condición, cuando se presentó ante él, le dijo: "Hambre, frío". Oído lo cual, el cardenal asintió, dando a entender que había comprendido, por lo que le dijo a su secretario, señalando al mendigo: "Comida, ropas". De este modo salió contento el mendigo. Preguntado qué fuera sobre lo ocurrido, dijo: con su Eminencia, "a buen entendedor, pocas palabras".




BIBLIOGRAFÍA.-

Caballero, Fernán. El refranero del campo y poesías populares. Madrid: Revista de Archivos, Museos y Bibliotecas, 1912.
Candón, Margarita et Bonnet, Elena. A buen entendedor. Diccionario de frases hechas de la lengua castellana. Anaya-Mario Muchnik, 2000.
Cantalapiedra, F. et Moreno, Juan (eds.). Diego García de Castro. Seniloquium: refranes que dizen los viejos. Valencia: Univ. Valencia, 2006.
Cantera Ortiz de Urbina, Jesús. Diccionario Akal del Refranero Latino. Madrid: Akal, 2005.
Etxabe Díaz, regino. Diccionario de refranes comentado. Madrid: Ed. de la Torre, 2012.
García Remiro. A buen entendedor... Dichos, frases y expresiones: su significado y su origen. Madrid: Alianza Editorial, 2010
Iribarren, José María. El porqué de los dichos. Barcelona: Planeta, 2013.
Junceda, Luis. Del dicho al hecho. Barcelona: 1991.
Martín Caro y Cejudo, Gerónimo. Refranes y modos de hablar castellanos con los latinos que les corresponden, y la glosa y explicación de los que tienen necesidad de ella. Madrid: Imprenta Real, 1792.
Núñez, Hernán. Refranes o proverbios en romance que coligió y gloso el Comendador Hernán Núñez, professor de Retórica y Griego en la Universidad de Salamanca. Madrid: Juan de la Cuesta, 1619.
Panizo Rodríguez, Juliana. Origen de algunos refranes, in Revista de Folklore, XIIIa, 148 (1993), pp. 140-144.
Torres, José Alejandro. Al buen entendedor... Breve antología del refrán. México: Lectorum S.A., 2005.
Vega, Vicente. Diccionario de anécdotas. Barcelona: 1956.

WEBGRAFÍA.

www.refranerocastellano.com

Refranero multilingue del Centro Virtual Cervantes.

Recopilatorio de más de 33.000 refranes de JuaAlDi.

► Web sobre la obra de Gonzalo Correas: "Vocabulario de refranes", realizada por Fernando Martínez del Carnero.







15 de julio de 2018

DIFERENCIAS ENTRE LA LENGUA ORAL Y ESCRITA.


Lenguaje es la capacidad [innata] que posee el ser humano para comunicarse por medio de signos” [lingüísticos].
Esta definición de Ducrot y Todorov, a pesar de las numerosas que se han dado, pretendemos que nos sirva de referencia.

La lengua es un código formal, integrado por signos lingüísticos que se combinan entre sí conforme a unas reglas gramaticales. Ésta se realiza de una manera específica en una comunidad hablante concreta (es lo que conocemos como lengua española, inglesa, francesa, etc.). Además, el uso de esa realización concreta puede ser oral o escrito.

Podemos afirmar, siguiendo a Saussure que ni la lengua que se emplea cuando se habla y se escribe es la misma, ni su uso es el mismo:

« lengua y escritura son dos sistemas de signos distintos; la única razón de ser del segundo es la de representar al primero; el objeto lingüístico no queda definido por la combinación de la palabra escrita y la palabra hablada; esta última es la que constituye por sí sola el objeto de la lingüística».
[Saussure, Ferdinand de. Curso de Lingüística General. Buenos Aires: Losada, 1945, Cap. VI: "Representación de la lengua por la escritura", pág. 51].

No obstante, hay que considerar que el código escrito no es una simple transcripción del código oral, ya que la expresión oral o la escrita tienen sus propias reglas.

Tradicionalmente se viene indicando que las diferencias sustanciales entre el uso oral y escrito radican en que:

La lengua oral es la forma más natural que el hombre emplea para comunicarse con los demás individuos: el hombre habla desde hace millones de años (y la escritura es de hace poco más de unos seis mil años), el niño habla antes de escribir, de manera espontánea (frente a la intencionalidad y planificación del aprendizaje de la escritura)... —más aún, hay personas que no saben escribir y leer, pero sí hablar (a la inversa es imposible), de hecho, existen todavía pueblos primitivos y antiguos que poseen su propia lengua, pero carecen de escritura—; que ésta se manifiesta a través de sonidos articulados fonéticamente (fonemas), siendo por ello necesario que los interlocutores de cualquier acto comunicativo oral estén presentes, convirtiéndose en un acto de inmediatez, de carácter efímero, y de espontaneidad (salvando aquellos casos en que han sido planificados previamente, como una representación teatral, una conferencia...), permitiendo manifestar más libremente nuestras emociones , y primando en él la claridad, concisión, sencillez y naturalidad.

La lengua escrita, en cambio, se realiza a través de signos gráficos (grafemas), por lo que no es necesario que los interlocutores compartan la simultaneidad del espacio y tiempo, de ahí las características de ser un acto diferido y de perdurabilidad, tener mayor elaboración, esfuerzo y cuidado (pues es una forma sustitutiva de la oral, aunque no sólo; es artificial, requiriendo una instrucción especial, y se elabora de manera consciente) por ajustarse a las normas...

No obstante, lo cierto es que los códigos oral y escrito se diferencian en bastantes más características de tipo contextual y textual. Por eso vamos a seguir en esta cuestión a Daniel Cassany, quien nos señaló algunas de las diferencias más importantes entre el uso oral y el escrito de la lengua.
[Cassany, Daniel. Describir el escribir. Cómo se aprende a escribir. Barcelona: Paidós, 1987, pp. 34-40].


DIFERENCIAS CONTEXTUALES.

Se refieren al contexto de la comunicación: espacio, tiempo y relación entre los interlocutores.

LENGUA ORAL. LENGUA ESCRITA.
 Grado de planificación: Comunicación espontánea.
Se produce en un contexto inmediato que no da cabida a la planificación.
El hablante (emisor) puede rectificar, pero no borrar lo que ya ha dicho.
El oyente (receptor) está obligado a comprender el texto en el momento de la emisión y tal como se emite.
 Grado de planificación: Comunicación elaborada.
Es una comunicación diseñada y planificada.
El emisor puede corregir y rehacer el texto sin dejar rastros.
El lector (receptor) puede escoger cómo y dónde quiere leer el texto (en qué orden, la velocidad, etc.).
Comunicación inmediata.
Tanto en el tiempo como en el espacio.
Comunicación diferida.
Tanto en el tiempo como en el espacio
Comunicación efímera.
Los sonidos son perceptibles solamente durante el tiempo que permanecen en el aire.
Comunicación duradera.
Las letras se graban en un soporte estable y perduran. El escrito adquiere valor social de testigo y registro de los hechos.
Utiliza mucho los códigos no verbales.
La fisonomía, vestidos, movimientos, paralenguaje (cualidades de la voz y vocalizaciones: risa, llanto), etc.
 Utiliza poco los códigos no verbales.
En cambio, se apoya en la disposición del espacio y del texto, la textura del soporte, etc.
 El contexto extralingüístico posee un papel muy importante.  El contexto extralingüístico es poco importante.
El escritor crea el contexto a medida que escribe.
Canal auditivo-visual.
La comunicación sólo es posible a través de los canales auditivos-visuales.
Canal visual.
La escritura sólo tiene esta posibilidad (a pesar del código morse para los ciegos)
Receptores limitados.
Siempre debe haber interlocutores presentes (aunque no siempre están presentes físicamente en la inmediatez, pues las nuevas tecnologías lo permiten.
Por otro lado, los receptores de un diálogo, conversación, charla, conferencia, etc., son limitados siempre.
Receptores innumerables.
Los receptores de un texto escrito son innumerables e inacabables.
Y el emisor siempre está ausente, distante no sólo físicamente, sino también en el tiempo.
 Hay interacción durante la emisión del texto.
Mientras habla, el hablante (emisor) ve la reacción del oyente y puede modificar su discurso.
No hay interacción durante la composición.
El escritor no puede conocer la reacción del lector.
 Hay posibilidad de retroalimentación inmediata durante la emisión del texto.
El receptor es capaz de poder responder inmediatamente a lo que el hablante comunica.
Las emisiones se solapan, interrumpen, cortan, etc.
No hay posibilidad de retroalimentación inmediata.
El lector no puede contestar inmediatamente a lo que ha comunicado el escritor.
(Hoy, con las nuevas tecnologías, existe una posibilidad "factible", vía correo electrónico, chats, redes sociales, etc.

EJERCICIOS INTERACTIVOS. DIFERENCIAS ENTRE LA LENGUA ORAL Y ESCRITA.

Daniel Cassany (in Describir el escribir. Cómo se aprende a escribir. Barcelona: Paidós, 1989) estableció unas serie de diferencias contextuales (esto es, referidas al contexto de la comunicación: espacio, tiempo y relación entre los interlocutores), entre la lengua oral y la lengua escrita. Ya lo hemos estudiado en la entrada "Diferencias entre la lengua oral y escrita", de este blog. Ahora le proponemos diversos ejercicios.


1. Disfrute de este VÍDEO DE YOUTUBE, realizado con fines didácticos para el programa Sec'21, de la Universidad Pedagógica Nacional de México, del año 2000, bajo el guión de Mabel Encinas y Maria Cora Sánchez, y donde se explican muchos de los elementos que queremos que logre a comprender y asimilar, de 12'59'' de duración: https://www.youtube.com/watch?v=7lsaA1aQBu0




2. Vuelva a releer la parte teórica que le ofrecemos en nuestra entrada:
"Diferencias entre la lengua oral y escrita".

3. FICHAS PARA ESTUDIAR:
Ahora vamos a ver si ha asimilado la teoría. Comenzamos por las diferencias contextuales (pinche sobre ellas y diga a qué tipo de lenguaje pertenecen las aseveraciones que van apareciendo).

30 de mayo de 2018

EJERCICIOS INTERACTIVOS SOBRE EL "CANTAR DE MÍO CID" (Previos).


TEMAS QUE VAMOS A DESARROLLAR
texto aquí

Los ejercicios interactivos que te vamos a ir proponiendo sirven para que recuerdes tus conocimientos previos sobre el "Cantar de Mío Cid", afiances nuevos conocimientos, y para facilitarte tu labor investigadora y capacidad de interés.


1. Introducción teórica. Repaso de conocimientos previos de otros cursos.



Si quieres compartirlo pincha AQUÍ.


2. Continuamos con la introducción teórica. Repaso de los conocimientos previos de otros cursos.



Si quieres compartirlo, pincha AQUÍ.


3. Señalamos ahora algunos de los conceptos clave que van a ser necesraios que sepamos discernir claramente.


Cantar de Mío Cid -III- Introd


Si quieres compartirlo, pincha AQUÍ.








1 de mayo de 2018

EL REALISMO Y NATURALISMO EN LA NOVELA ESPAÑOLA.


TEMAS QUE VAMOS A DESARROLLAR
0. Introducción.

a) Contexto histórico.

b) Contexto cultural.

b.1. ¿Quién y qué novelas se leían hasta 1868 en España?.

b.2. ¿Qué características generales del realismo podemos concluir de esto?

Diferencias entre el Romanticismo y el Realismo

1. El realismo en la novela europea.

1.1. En Francia.

A. Henry Beyle, “Stendhal” (1783-1842).

Honoré de Balzac (1799-1850).

Gustave Flaubert (1821-1880).

1.2. En Inglaterra.

William Thackeray (1811-1863).

Charles Dickens (1812-1870).

William Wilkie Collins (1824-1889).

Las hermanas Brönte.

1.3. En Rusia.

Nicolai Gogol (1809-1852)

Ivan Turgeniev (1818-1883).

Fedor Dostoievski (1821-1910)

Leon Tolstoi (1828-1910)

2. La novela realista en España.

2.1. Antecedentes.

2.2. Características generales del realismo en la novela.

2.3. Temporalización.

2.4. Autores prerrealistas.

Cecilia Böhl de Faber, “Fernán Caballero” (1796-1877).

Pedro Antonio de Alarcón (1833-1891).

2.5. Autores realistas.

Juan Valera (1824-1905).

José María de Pereda (1833-1906).

Benito Pérez Galdós (1834-1920).

El Padre Coloma (1851-1914).

Armando Palacio Valdés (1853-1938).

3. El naturalismo en la novela.

3.1. Origen.

3.2. El naturalismo en España.

3.2.1. El naturalismo radical.

Eduardo López Bago.

Alejandro Sawa Martínez.

3.3. Autores naturalistas españoles más significativos.

Emilia Pardo Bazán (1851-1921).

Leopoldo Alas Clarín (1852-1901).

Vicente Blasco Ibáñez (1867-1928).


[N.B. Esta entrada ha sido reactualizada con nuevas incorporaciones audiovisuales].


O. INTRODUCCIÓN.

El Realismo debemos considerarlo como una estética derivada parcialmente del Romanticismo, al que supera en sus propósitos, y con el que comparte espacio histórico, y que, aunque apareció en Francia hacia 1830 ("El rojo y el negro" de Stendhal es de 1839), alcanzará su plenitud en la década de 1850.

Recordemos que ya en 1826 "Le Mercure français" definía como "realismo", aplicado a la literatura, la imitación de la Naturaleza y el detalle descriptivo de algunos creadores románticos.
[Cfr.: Gutiérrez Carbajo, F. Movimientos y épocas literarias. Madrid: UNED. 2013, pág. 145].

Luego, en 1850 el término se aplicará al campo pictórico, por un tiempo con un matiz despectivo, desde que Courbet realizó una exposición titulada Le Réalisme, la cual provocó un amplio debate sobre el nuevo estilo, que quedó definido en la revista "Réalisme", dirigida por Duranthy, como un arte que pretende la reproducción exacta, completa y sincera, del ambiente social y de la época en que vivimos. Dicha reproducción debe ser lo más sencilla posible, para permitir al gran público su mejor comprensión. Además, se concreta que la única fuente de inspiración es la realidad objetiva (alejada del idealismo romántico), la cotidianidad, y con ella, sus gentes (no héroes ensalzados, divinizados, sino burgueses, proletarios, campesinos), inmersos en escenarios y paisajes contrastables (no idealizados, embellecidos), convirtiéndose el mismo arte en una confrontación con el convencionalismo social (al hacerlo patente y criticarlo).
[Cfr.: Watt, I. "Réalisme et forme romanesque", in Littérature et réalité. Paris: Seuil, 1982, pág. 13].

El Realismo surge, pues, cuando los escritores deciden retratar la realidad de la sociedad burguesa, de su momento presente, reflejarla objetivamente mediante la observación (sin deformación ni idealización), a través de descripciones minuciosas y exactas de ambientes y personajes (de su físico e interior, de sus conductas, motivaciones, etc.). Para ello, los escritores realistas se documentarán concienzudamente, pues pretenden ser cronistas, historiadores del presente. Y aunque pretenden distanciarse, esconderse de lo que cuentan, para mostrar objetividad, recurriendo a la focalización externa, no pocas veces dejan oír su voz exponiendo juicios y observaciones personales.

8 de abril de 2018

LA NOVELA SENTIMENTAL DE LOS SIGLOS DE ORO


TEMAS QUE VAMOS A DESARROLLAR
0. Introducción.
1. Características generales.
2. Orígenes.
3. Corpus de las obras y etapas más significativas.
4. Comentario de las obras más representativas.

Juan Rodríguez del Padrón.

Siervo libre de amor.

Diego de San Pedro.

Tratado de Amores de Arnalte y Lucenda.

Cárcel de amor.

Juan de Flores.

Historia de Grisel y Mirabella, con la disputa de Torrellas y Braçaida.

Breve tratado de Grimalte y Gradissa.

O. INTRODUCCIÓN.

La novela sentimental de los siglos XV y XVI o erótico-sentimental, en expresión de Marcelino Menéndez Pelayo es, junto con la novela pastoril, la que muestra una estructura más cerrada de nuestra literatura.
[Aunque hubo críticos que no estaban de acuerdo con la denominación de Menéndez Pelayo, como fue el caso de R. Schevill (1913), por ejemplo, que propuso la nomenclatura de "cuentos o novelas ovidianas", y que J. I. Ferreras puso sobre la mesa que podía esta nomenclatura dar a confusión con la novela sentimental del siglo XIX, o que Deyermond mediara denominándolas "ficción sentimental", seguimos manteniéndola por ser la más generalizada.
Cfr.: Blay Manzarena, Vicenta: «La conciencia genérica en la ficción sentimental (planteamiento de una problemática))),in ed. Beltrán, R., et Canet J. L., et Sirera, J. L. (coords.). Historias y ficciones: Coloquio sobre la literatura del siglo XV. Valencia: Universitat de Valencia, 1992, pp. 205-226.
Deyermond, A. D. "Estudio Preliminar", in Parrilla, C. (ed.). Diego de San Pedro. Cárcel de amor. Barcelona: Crítica, 1996.
Ferreras, J. I. La novela en el siglo XVI. Madrid: Taurus, 1987.
Rohland de Langbehn, Regula. La unidad genérica de la novela sentimental española de los siglos XV y XVI. London: Dept. of Hispanic Studies, Queen Mary and Westfield College, 1999].

Estas novelas pertenecen al género de literatura de evasión, idealista (pero también con una clara finalidad polémica y didáctica), que tuvo un gran éxito entre el público cortesano y, especialmente, entre las mujeres, fruto de una vuelta atrás a los viejos valores caballerescos en una sociedad que ve como se van desintegrando las estructuras medievales, y que está íntimamente relacionada con las novelas de caballerías, además de presentar conexiones con otros géneros, como veremos.
[Así, la "Sátira de felice e infelice vida" de don Pedro de Portugal se dedica a su hermana Isabel de Portugal; el "Tractado de Arnalte y Lucenda" de Diego de San Pedro se dirige a las damas de la reina Isabel la Católica; Juan de Flores dedica su "Historia de Grisel y Mirabella" a una "su amiga" y Jiménez de Urrea dedica la "Penitencia de amor" a la Condesa de Aranda, su madre; el "Tratado llamado Notable de Amor" de Juan de Cardona, se escribe para ser leído en la tertulia de la duquesa Doña Potenciana; Juan de Lucena también dedicará su "Repetición de amores", a "una su amiga".
Del gusto por estas novelas por parte del público femenino, quedan marcados muchos de los rasgos de este novelas, incorporando no sólo actividades propias de la corte (debates amorosos, justas poéticas, cacerías, torneos, fiestas, descripción de indumentaria —curiosamente las únicas descripciones a destacar de estas novelas—), sino también comentarios dirigidos a la buena educación de las mismas.
Cfr.: Martínez Latre, Mª Pilar. "Usos amorosos e indumentaria cortesana en la Ficción Sentimental (siglos XV y XVI)", in Toro Pascual, M. I. Actas del III Congreso de la Asociación Hispánica de Literatura Medieval, Salamanca, 3 al 6 de octubre de 1989, pp. 569-579].

Muestran

«como principal argu­mento una historia de amor cuyo desenlace será siempre funesto por ser resultado de un conflicto en el que se en­frentan dos fuerzas: de un lado, la pasión amorosa y, de otro, una sociedad represora condicionada por el código del honor que condena a los enamorados con la muerte. Ésta será la situación dramática que, invariablemente, se re­petirá en todas las novelas. Allí donde nace el amor no hay posible escapatoria, a los enamorados sólo les caben dos op­ciones: entregarse a la pasión (al furor amoris) y rebelarse contra las normas establecidas de su sociedad, que no dudará en castigarlos; o acatar las reglas de la moral y el honor, que, en cualquier caso, también les condenan, porque el alejamiento del amado supondrá, en unos casos, el suicidio, en otros, la frustración».
[Ariza, Manuel et Criado, Ninfa. Antología de la prosa medieval. Madrid: Biblioteca Nueva, 1998 ].

22 de febrero de 2018

EL MOTIVO LITERARIO DE "LAS NUBES", ANTES Y DESPUÉS DE AZORÍN.


"LAS NUBES", DE AZORÍN.

El texto que es objeto de nuestro comentario, y del cual partimos para analizar el motivo literario de las nubes, pertenece al libro "CASTILLA", publicado en 1912, correspondiéndose con la parte en la que Azorín toma varios personajes de la literatura española y les da nueva vida, a lo largo de cuatro capítulos, que son:

① “Las nubes”, donde taracea una nueva ficción sobre el recuerdo de La Celestina [de Fernando de Rojas];
② “Lo fatal”, donde lo hace con [el tratado tercero de] el Lazarillo [de Tormes];
③ “La fragancia del vaso”, que opera sobre “La ilustre fregona” [una de las Novelas ejemplares cervantinas,
④ y “Cerrera, cerrera…”, que lo es de La tía fingida, una novela corta difícilmente atribuible a Cervantes],

-y que se hace tema de un libro íntegro en "El licenciado Vidriera visto por Azorín" (1915, luego titulado "Tomás Rueda"), para entrar [más tarde] en el terreno de la franca creación novelesca con "Don Juan" (1922) y "Doña Inés" (1925).
[Mainer, José Carlos. "Tres lecturas de los clásicos españoles (Unamuno, Azorín y Machado"), in Mélanges de la Casa de Velázquez, XXXI, 2 (1995), pág. 182].


10 de enero de 2018

ÍNDICE. LAS NUEVAS FORMAS DEL TEATRO ESPAÑOL DE LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX.


TEMA 30. LAS NUEVAS FORMAS DEL TEATRO ESPAÑOL EN LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX.

1.- Esquema del teatro español de la primera mitad del siglo XX.


BLOQUE 1.

2.- Crisis de la alta comedia de Echega­ray.

2.1. B. Pérez Gal­dós.

2.2. Joaquín Dicen­ta.

3.- La comedia burguesa y de evasión: Jacinto Benavente.

3.1. Introduc­ción.

3.2. Clasificación de su obra tea­tral.

3.3. Obras de interiores burgueses ciudadanos.

3.3.1. El nido aje­no.

3.3.2. Gente conoci­da.