24 de febrero de 2016

LOS SONIDOS DE LOS ANIMALES. ONOMATOPEYAS


Nos señaló Manuel Alvar ["Onomatopeyas, gritos de animales y lexicaciones", in Delbecqueque, N. et Paepe, C. de.- Estudios en honor del profesor Josse de Kock. Louvain, Presses Universitaires de Louvain, 1998, pp. 13-22] que aunque Karcevski afirmó que a cada animal sólo se le caracteriza por un sonido, teniendo las interjecciones onomatopéyicas que empleamos referidas a ellos un carácter motivado, no siempre son interpretados (escuchados, entendidos) esos sonidos de igual manera por el hombre. Así, baste sólo fijarse en cómo un mismo animal tiene representaciones onomatopéyicas dispares en distintas lenguas (p. ej., el sonido del gallo en español es "quiquiriquí", en francés "cocorico", en alemán "kikeriki", en inglés "cock-a-doodle-doo", etc) [puedes escuchar algunos de estos sonidos en diversos idiomas pinchando aquí], o como dentro de un mismo idioma, "los diversos estratos sociales y los diversos grados de la cultura determinan grados distintos en la estimación y creación de las voces naturales"[ García de Diego, Vicente.- Diccionario de Voces Naturales. Madrid, Aguilar, 1968, pág. 18].