29 de enero de 2016

CUÁNDO SUCEDE LA HISTORIA. TIPOS DE TIEMPO EN LA NARRACIÓN.


Acerca del TIEMPO debemos indicar inicialmente que éste ES CONSUSTANCIAL AL SER HUMANO (como dijo E. Kant: "el hombre tiene una capacidad innata para percibirlo").

El tiempo se constituye en un elemento fundamental de la personalidad individual y es un aspecto esencial de la construcción social de la realidad:

"la temporalidad es una propiedad intrínseca de la conciencia. El torrente de la conciencia está siempre ordenado temporalmente. Es posible distinguir niveles diferentes de esta temporalidad que se da intrasubjetivamente. Todo individuo tiene conciencia de un fluir interior del tiempo, que a su vez se basa en los ritmos psicológicos del organismo aunque no se identifica con ellos (...)
La estructura temporal de la vida cotidiana me enfrenta a una facticidad con la que debo contar, es decir, con la que debo tratar de sincronizar mis propios proyectos. Descubro que el tiempo en la realidad cotidiana es continuo y limitado. Toda mi existencia en este mundo está ordenada continuamente por su tiempo, está verdaderamente envuelta en él. Mi propia vida es un episodio en el curso externamente artificial del tiempo. Existía antes de que yo naciera y seguirá existiendo después que yo muera. El conocimiento de mi muerte inevitable hace que este tiempo sea limitado para mí. Cuento solo con una determinada cantidad de tiempo disponible para realizar mis proyectos, y este conocimiento afecta mi actitud hacia esos proyectos. Asimismo, puesto que no quiero morir, este conocimiento inyecta una angustia subyacente en mis proyectos. De esa manera, no puedo repetir indefinidamente mi participación en acontecimientos deportivos. Sé que me estoy poniendo viejo. Tal vez sea ésta la última oportunidad en la que pueda intervenir. Mi espera se volverá ansiosa según el grado en que la finitud del tiempo gravite sobre el proyecto.
[Berger, Peter et Luckmann, Thomas.- La construcción social de la realidad. Buenos Aires, Amorrortu-Murgia, 1984, pp. 44-45].

Pero, además, el hombre "se va haciendo con el tiempo", gracias a que es un "ser de memoria" (esto es, capaz de mantener presente el pasado (selectivamente), por lo que se hace su tiempo acumulativo) y "de proyecto" (de planificación, de búsqueda de objetivos, de futuro). Es decir, el hombre es bifronte, siempre mirando al pasado y al futuro.
[Cfr.: Cruz, Manuel.- "Tiempo de la narratividad (el sujeto entre la memoria y el proyecto)", in Anàlisi, 25 (2000), pp. 23-40.
Polo, Leonardo.- Quién es el hombre. Un espíritu en el tiempo. Madrid, RIALP, 2003, pp. 42-62].