11 de agosto de 2015

EL TEXTO DESCRIPTIVO. (II).


TEMAS QUE VAMOS A DESARROLLAR
SECCIÓN I.
1. Definición de Descripción.
2. Características generales del texto descriptivo.
3. Fases en todo proceso descriptivo.
SECCIÓN II.
4. Operaciones de organización en la descripción.
5. Función comunicativa de la descripción.
6. Tipos de descripción atendiendo al descriptor.
SECCIÓN III.
7. Tipos de descripción atendiendo al objeto de descripción.
8. Tipos de descripción atendiendo a la estructura del texto.
9. Tipos de descripción atendiendo a las relaciones estructurales establecidas en la descripción (Mieke Bal).
10. Bibliografía.

4. OPERACIONES DE ORGANIZACIÓN DE LA DESCRIPCIÓN.

Ph. Hamon explicó que un sistema descriptivo es un juego de equivalencias jerarquizadas: equivalencia entre una denominación (una palabra) y una expansión (una serie de palabras yuxtapuestas en lista o coordinadas y subordinadas en un texto); la denominación asegura la permanencia y la continuidad del conjunto y sirve de término rector, sincrético ("Pantonyme") para la descripción. Ésta se organiza como un «museo», como una suma de saberes, como una enciclopedia.
[Hamon, Ph..- Introduction ´l'analyse du descriptif. Paris, Hachette, 1.981, pág. 140.]

Por eso, toda descripción supone la construcción, en forma de texto, de una red semántica de gran densidad definida por una jerarquía de relaciones con las consiguientes estrategias de anticipación o de retroacción de la actividad de lectura.
[Hamon, Ph..- Introduction ´l'analyse du descriptif. Paris, Hachette, 1.981, pág. 163.]

Es precisamente la organización de los saberes enciclopédicos de los sujetos la que defiende la idea de «sistema descriptivo» organizado alrededor de una palabra-núcleo, que es la manera como se definen y organizan los conceptos en la memoria a largo plazo.

Matizando estas cuestiones, J. M. Adam [Adam, J. M..- Les textes: types et prototypes. Paris, Nathan, 1.992, pp. 75-102] dirá que la secuencia descriptiva se articula estableciendo en el texto un orden jerarquizado que va trazando una serie de relaciones verticales entre los diversos elementos que componen el tema descrito, y que son:

① Procedimiento de anclaje referencial.

El anclaje orienta al descriptario (receptor) sobre la relación de las proposiciones con un tema determinado, y no con otro, es decir: con el objeto de la descripción. Es la operación que establece lo que se va a describir, es el eje de la descripción. El referente orienta y justifica el recorrido de la descripción. Es el punto de partida de la descripción y suele coincidir con el título o el tema de la misma. Es un núcleo de entrada que generará una expansión.

Aquí, el emisor tiene varias posibilidades según su intención comunicativa:

o El anclaje típico va al principio del texto de modo que sabemos a quién o a qué se atribuyen las partes, las propiedades, etc.

o El anclaje con afectación es, según Adam, el que no tiene lugar hasta el final de la secuencia descriptiva por necesidades discursivas de generar expectativa o suspense. En ella tenemos un conjunto de proposiciones que caracterizan un objeto: el receptor tiene que ir acotándolo a medida que avanza en la lectura, como en un juego de suspense. Tanto es así que puede dejarse sin mencionar, por ejemplo en las adivinanzas.

o Hay también descripciones que presentan dos o más expresiones para designar el objeto descrito, con la finalidad de ofrecer una representación más rica y sugerente de lo diversas que pueden ser las interpretación del objeto descrito. A estas descripciones las denomina Adam "reformulaciones"; suelen ser subjetivas y con una particular carga de intención.

② Operaciones de aspectualización.

Con estas operaciones, el sujeto descriptor trata de llevar a cabo la descripción del objeto mediante la fragmentación de todos sus “aspectos” o rasgos, generalmente por enumeración, en partes y/o propiedades. Las partes mantienen una relación sinecdóquica en relación al total del objeto.

Las dos fórmulas utilizadas son: la enumeración de sus partes y la enumeración de sus propiedades o cualidades (color, dimensión, talla, etc.).

Tales enumeraciones pueden ser exhaustivas o selectivas, según la intención latente en la descripción. En este sentido, la excesiva parquedad puede conducir a la indefinición, e, igualmente, la acumulación de información puede llegar a desdibujar el objeto de descripción. Ambas tienen que estar determinadas por el principio de relevancia: seleccionar y resaltar aquellas partes o propiedades que distingan al objeto por oposición con otros parecidos. Y ello puede suceder hasta el punto de que no exista propiamente enumeración: “Winston: el genuino sabor Americano".

Los marcadores o conectores para desarrollar los diversos “aspectos” escogidos del objeto a describir pueden ser:

Marcadores y conectores de enumeración: y, también, además, asimismo, igualmente, de igual manera, en la misma forma, por otra parte, a lo que hay que añadir, todavía...

Marcadores y conectores de ordenación o integración lineal: primero, en primer –segundo…- lugar, a continuación, seguidamente, más adelante, después, inicialmente, posteriormente, finalmente , por ultimo, por un lado, por otro lado…

Marcadores y conectores de organización temporal:

anterioridad: antes, hasta el momento, hasta aquí, en el pasado, hace mucho tiempo…;

simultaneidad: en este momento, en la actualidad, actualmente, aquí, ahora, al mismo tiempo, a la vez...;

posterioridad: después, luego, más abajo, seguidamente, más adelante, próximamente….

Marcadores y conectores de organización especial: delante, detrás, a la derecho, a la izquierda, arriba, abajo, al norte, al sur…, a lo lejos, más allá, aquí, cerca,

[Cfr.: Vásques, D..- Producción de textos académicos (curso propedéutico). Mimeo, Caracas, 2.003].

③ Operaciones de reformulación y tematización.

Cuando el tema ha sido presentado, puede ser reformulado por medio de una paráfrasis o de una formula especial que contribuye a fijar mejor el tema tratado en la mente del destinatario o descriptario.

La reformulación opera como un factor de reanclaje temático con el que el sujeto descriptor realiza una actividad de aclaración, precision, ironía, caricatura, etc.

Suele usar marcadores específicos: en una palabra, o sea, esto es, es decir, dicho de otro modo, con otras palabras, en otras palabras, de igual manera, total, en resumidas cuentas, en síntesis, por ejemplo, verbigracia, así, específicamente, mejor dicho, etc...

Por otro lado, la tematización muestra como todo aspecto se puede convertir en un nuevo tema. El anclaje y la asignación se centran en el tema o hipertema de la descripción; la tematización en los temas manifestados (partes o aspectos del hipertema) o en los temas del tema-título. De esta manera, cualquier elemento referido al objeto central de la descripción puede ser seleccionado como un nuevo objeto de descripción, es decir, como un nuevo tema, que puede generar nuevas proposiciones descriptivas, aunque se inserte en una macroestructura descriptiva general. La tematización de estos elementos podría repetirse hasta el infinito, engarzando una descripción dentro de otro.

④ Operaciones de puesta en relación y de asociación.

La puesta en relación del objeto descrito con el mundo exterior se hace, básicamente, mediante dos operaciones: el enmarque situacional y la asociación.

El enmarque situacional tiene como base situar al objeto de descripción local y temporalmente y se lo relaciona con otros objetos por contigüidad, generando una relación metonímica, tanto por su situación espacio-temporal como por lo que respecta a otros objetos próximos, cuyas cualidades ayudan a definirlo, representarlo y situarlo.

La asociación (o asimilación) aproxima el conjunto de aspectos diferentes de dos o más objetos supuestamente conocidos por el receptor, de modo que ayuda a entender el objeto de descripción por su parecido o divergencia con aquéllos. Las asociaciones se establecen principalmente a través de los recursos que ofrece la comparación y la metáfora.

• Mediante la comparación se pone de manifiesto los puntos de semejanza o de diferencia entre dos objetos: uno de ellos suele ser conocido por el receptor.
Suele emplear los marcadores y conectores siguientes: como, parecido a, de igual modo, de modo semejante, similarmente, asimismo, parecido a….
En algunos casos no se especifica el segundo punto de comparación porque el conocimiento del mundo del receptor lo asume. No obstante, en otros casos se hace con la intención de que sí exista una cierta ambigüedad, provocando una evocación abierta en el receptor.

• La asociación por metáfora consiste en señalar la intersección de semas -o rasgos de significado- entre el objeto descrito y otro; de este modo se resaltan por analogía unas cualidades concretas.
La metáfora suele marcar la subjetividad del emisor, al tiempo que exige al receptor una descodificación más laboriosa.

[Cfr.: Herrero Cecilia, Juan.- Teorías de pragmática, de lingüística textual y de análisis del discurso. Cuenca, UCLM, 2.006, pp. 113-115.
Bassols, M. et Torrent, A. M..- Modelos textuales. Teoría y práctica. Barcelona, Octaedro, 1.997, pág. 111.].

Lo expuesto se corresponde con lo que viene denominando "la descripción del SER" de un objeto, animal o persona, es decir, la que procede analizando las partes de los mismos (aspectualización) y las cualidades del objeto o de cada parte a describir. Sin embargo, también se pueden describir acciones o procesos, lo que definimos como la “descripción del HACER”, porque suelen utilizar generalmente verbos como "hacer".

En la “descripción del HACER”, las acciones descritas o fases del proceso aparecen ordenadas cronológicamente, por lo que es relativamente frecuente que se confunda con la narración o relato, si bien es verdad que aquél se compone de complicación y resolución, y este último, no. Estos textos pertenecen a los denominados instructivo-prescriptivos: receta de cocina, instrucciones de montaje, consignas y reglamentos, reglas de juego, guías-itinerarios, etc. En general, se trata de una sucesión de actos o de hechos ordenados cronológicamente...

Como hemos dicho, tenemos en este tipo de descripción una clara relación con el texto narrativo. ¿Cómo se organiza la "descripción del hacer" entonces? Fundamentalmente de tres maneras:

1. Caracterización de un personaje describiendo su comportamiento a través de una serie de acciones que lo caracterizan.

2. Caracterización de una situación describiendo las acciones de un conjunto de actores considerados como elementos de esa situación. Este tipo de descripción es muy frecuente al inicio de los relatos y muy utilizada en el cine para crear ambiente.

3. Descripción de una acción explicando los momentos de la misma. La secuencia descriptiva es el desarrollo de un tema-título que designa la acción.

5. FUNCIÓN COMUNICATIVA DE LA DESCRIPCIÓN.

La función comunicativa dominante de la descripción es la referencial, pues no en vano dedicamos el texto a describir cómo es algo. Teniendo como intención comunicativa clara la de informar, explicar y describir un “objeto”.

Sin embargo, el texto descriptivo puro no suele ser habitual, pues lo más frecuente es que la descripción sea una secuencia de otra unidad mayor (narración, argumentación, explicación), por lo que puede, además, tener la intención de embellecer el mensaje (función poética), provocar un comportamiento en el receptor (apelativa) o de tan subjetivo que es el punto de vista del descriptor, manifestar sus propias sensaciones o emociones (función expresiva).

Por tanto, las funciones comunicativas que cumple toda descripción son:

a) Deíctica o referencial, ya que el texto designa objetivamente los rasgos y características de la materia descrita.

b) Connotativa, ya que los términos adquieren una nueva tonalidad, sugiriendo ciertos aspectos favorables o desfavorables.

c) Simbólica, cuando se da una postura valorativa hacia lo presentado.

d) Rítmica, ya que no hay ruptura entre la narración y la descripción.

Pero nos recuerda Teodoro Álvarez que
"Los estudiosos de la descripción (Genette, Hamon, Adam, Petitjean, Reuter) diferencian entre lo descriptivo y la descripción. Por descriptivo entienden el proceso que origina las proposiciones y secuencias descriptivas, es decir, el elemento de composición de todo texto que consiste en dar al lector la impresión de que ve el objeto descrito. La descripción es el término específico que designa los modos de presencia textuales de lo descriptivo; en otros términos: secuencia(s) de proposiciones producto de la actividad de esquematización descriptiva.
Describir supone principalmente «describir para»: es una práctica textual con una finalidad que desemboca en una serie de actividades concretas, tanto en la vida social como escolar (inventarios de almacenamiento, archivos, proceso de instrucción judicial..). Por consiguiente, como decíamos más arriba, describir no es forzosamente hacer literatura".

[Álvarez Angulo, Teodoro.- "La descripción en la enseñanza de la lengua", in Didáctica (Lengua y Literatura), 11 (1.999), pág. 23].

De ahí que podamos decir que, otras funciones añadidas de la descripción son:

a) La construcción y difusión del saber. La descripción informa, explica, bajo una forma figurada. La modalidad informativa trata de dar forma a los objetos del discurso, pretende construir un cuadro realista o no, decir cómo es algo o alguien; por lo cual la descripción desempeña un papel de identificación. Desde la óptica de la explicación, se trata de hacer comprender, de proporcionar el saber.

b) Función evaluativa. La descripción tiene siempre, de forma más o menos marcada y explícita, una función evaluativa (o argumentativa o axiológica), en cuanto que clasifica y categoriza; no es neutra, sino que adopta un cierto punto de vista y vehicula valores. Esta función de la descripción es omnipresente: se hace presente en todos los lugares de la descripción, desde la selección del objeto, de las partes y de las especificaciones, modos de designación, organización, etc.

c) Función reguladora. La descripción participa de la gestión, del control, de la regulación de las transformaciones de los objetos y de los contenidos de los discursos tanto retrospectivamente (ej.: la autopsia, que da cuenta de lo que sucedió anteriormente), como proactivamente (cuando se remite al futuro).

d) Función de textualización. La descripción sitúa al texto, a su autor y a sus lectores en una determinada práctica y a un determinado nivel de competencia. Mediante las elecciones que se hacen, la descripción se posiciona con respecto a un campo determinado (científico, estético...). En el campo científico, p. e., la descripción obedece a normas precisas y aparece acompañada de un comentario metadescriptivo.

e) Gestión de la lectura y de la escritura. Tanto se trate de describir profusamente, como de condensar mediante resúmenes, es función de la descripción controlar la comprensión y el interés para facilitar la memorización.
[Álvarez Angulo, Teodoro.- "La descripción en la enseñanza de la lengua", in Didáctica (Lengua y Literatura), 11 (1.999), pág. 24].



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8. Tipos de descripción atendiendo a la estructura del texto.
9. Tipos de descripción atendiendo a las relaciones estructurales establecidas en la descripción (Mieke Bal).
10. Bibliografía.
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1. Definición de Descripción.
2. Características generales del texto descriptivo.
3. Fases en todo proceso descriptivo.







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